El presidente se comprometió conmigo, su elector, que no dejaría en pie el aparato ideológico "progresista" de la máquina pública. Prometió que ya no seríamos esclavos de la élite burocrática "progresista" que se hizo cargo del estado. Entonces, mis queridos defensores de un gobierno de los técnicos, ¿debería Bolsonaro romper una promesa conmigo, el elector, porque el ministro pensó que autonomía es independencia completa e inversión de la jerarquía? ¿El presidente tiene que comportarse como un adorno porque el ministro llama opción técnica retener en el puesto un elegido por el ex ministro comunista que comandaba la cartera? Por supuesto, tengo que aceptar que Moro, el tipo que lleva a Karnal a dar conferencias, que tiene autores izquierdistas como sus libros de cabecera, que guarda silencio frente a las violaciones más graves de las libertades individuales que hemos presenciado y que mantiene a los empleados nombrados en planta, a pesar de que son completamente contrarios a la agenda política que eligió al gobierno actual, siguen haciendo lo que quieren.
A. P. en cuadernos netnográficos