Ignorantes, idiotas, cobardes

No me parece que los miembros del actual gobierno sean muy conscientes del ambiente ostensiblemente golpista que los rodea en el Parlamento, en el judicial y en los medios. Fingen que están viviendo en una democracia normal, mientras que sus enemigos, con total cinismo, dan aires de legalidad a lar trampas criminales con los que intentan destruirlos.

Sólo un completo idiota puede creer -- y un cobarde abyecto fingir que cree -- en la viabilidad de un gobierno conservador democrático en un sistema de leyes montado expresamente, en cada uno de sus detalles, con la finalidad de operar la transición al comunismo.

El hecho de que la concepción de comunismo nacional tenga mucho de la economía fascista (alianza del Estado omnipotente con los mayores grupos económicos) sólo hace que el conservadurismo sea más inviable aún, incluso cuando llega a la presidencia de la República.

Todo depende ahora de que el gobierno entienda que la izquierda se ha pasado masivamente al campo de la criminalidad y debe ser combatida por medios legales, no políticos. Seguir fingiendo que las manadas de criminales son oponentes políticos normales es suicidio. O EL GOBIERNO PROCESA A LOS CRIMINALES, O LOS CRIMINALES COMIENZAN A PROCESAR AL GOBIERNO. Esa es la decisión de la hora. EL RESTO ES CHARLATANISMO.

Olavo de Carvalho, en cuadernos netnográficos